jueves, 13 de septiembre de 2012

en tránsito.





todos escondemos algo; miedos, deseos, ganas de.
yo me escondo de mí, de mi imagen, de la verdadera, al menos. cada que paso por delante del espejo, hago muecas, oculto las ojeras.

el cansacio cotidiano a veces me supera. no quiero recordarme así, no al menos cuando estoy en la cama, tirada sin ganas de nada. durmiendo horas y horas hasta que me duele el cuerpo. 
a veces pienso: ojalá pudiese hacer eso todos los días. pero después salgo... consumo el aire fresco y me enamoro de nuevo, de todo ésto.

me gusta salir con música en los oídos y que el viento me de vueltas. mirar a como la gente llena sus pulmones de aire. ese que van a usar para decir alguna mentira, para pensar alguna fantasía, para estar en una habitación vacía, ansiando que todo vuelva a ser como antes.

el estado de tránsito es difícil;
se ama equilibradamente la vida tanto como la muerte, se coquetea con las dos y nunca ninguna gana.
el tránsito es alegría y llanto. es espera, un "todas nuestras líneas estan ocupadas, por favor, intente mas tarde", constante.
estoy atrapada en el limbo. ese lugar  lleno de imágenes desconectadas, personas variadas, sentimientos estúpidos y fugaces (nada dura para un ser en tránsito, excepto el ser en sí mismo).

miro las cosas de afuera, veo campos de fuerza  y  los hilos que unen cada cosa. pero conmigo nada conecta. no soy un principio ni un fin.


soy un intermedio, infinito.




martes, 4 de septiembre de 2012

gato.

elegida. desordenada
triste. desanimada.
 nadie viene, nadie se va.
la nada rodea, de nuevo, la inmensidad.
no hay curiosidad, nada mata al gato.
vive eternamente, sus 7 vidas siguen intactas.
gasta las horas en una cama, el sueño le duele.
el cuerpo le sobra.
el cerebro le estalla.
reir le queda bastante grande.
resulta que el amor no existe o estamos viendo una película 3D sin anteojos especiales.
entrecierra los ojos: cree que hay algo ahí, estira la mano.
ahora solo le queda el espanto.
se huele,
se lame,
se vuelve a dormir.